martes, 28 de abril de 2015

Nos fragmentamos cuando nos desviamos de nuestro propio centro:


http://aldebaranlaestrelladelbuscador.blogspot.com.es/2014/05/nos-fragmentamos-cuando-nos-desviamos.html

Estamos permanentemente fragmentados y sin embargo queremos ser un todo. Estamos distraídos pero queremos concentrarnos; estamos esparcidos y sin embargo queremos estar reunidos, estamos esparcidos al extremo de rendir nuestro “yo” a cada impulso. Decimos “mis” gustos o aversiones, “mis” sentimientos, y “mi” dolor, y minimizamos ese “yo” a las proporciones de nuestro dolor personal. Ese “yo” se debilita y es absorbido por todas estas cosas. En cierto momento es absorbido en un acto compulsivo e inconciente, luego lo es en una vaga ansiedad. De un instante a otro, pasa de los gustos a las aversiones, pasa por diversas preocupaciones y motivaciones. Su atención salta rápidamente de estar acupada en lo que tiene enfrente para caer en un ensueño. Alguna facultad del “yo” se identifica con cada unos de estos eventos.

Nos fragmentamos cuando nos desviamos de nuestro propio centro. Cuando nuestra atención sólo está reaccionando ante los eventos externos, o cuando está siendo dominada por algo, pierde contacto con su propia fuente. La atención es una facultad sagrada, pero cuando es arrastrada por lo que tira más fuerte, no tiene fuerza propia; es pasiva. Si la atención no está conectada con la voluntad, el humano no es plenamente ser humano.


Kabir E. Helminski


Taller Día 28 de Abril de 2015


Lectura:



Explica el columnista Sidney Harris que, en una ocasión, acompañó a un amigo suyo a comprar el periódico. Al llegar al quiosco su amigo saludó amablemente al vendedor. El quiosquero, en cambio, respondió con modales bruscos y desconsiderados y le lanzó el periódico de mala manera. Su amigo, no obstante, sonrió y pausadamente deseó al quiosquero que pasase un buen fin de semana. ... Al continuar su camino, Sidney le dijo:
-Oye….¿este hombre siempre te trata así?
-Si, por desgracia.
-Y tú, ¿siempre te muestras con él tan educado y amable?
-Si, así es.
-Y ¿me quieres decir por qué tú eres tan amable con él, cuando él es tan antipático contigo?
-El bien fácil. Porque yo no quiero que sea él quien decida como me he de comportar yo.


La idea.....

“Algunas enseñanzas comparan al hombre con una casa de cuatro habitaciones. El hombre vive en la más pequeña y miserable de todas, y hasta que le sea dicho, no tiene la menor sospecha de la existencia de las otras tres, llenas de tesoros. Cuando oye hablar de ellas, comienza a buscar las llaves de estas habitaciones, especialmente de la cuarta, la más importante de todas. Y cuando un hombre ha encontrado el medio de penetrar en ella se convierte realmente en el “amo de la casa”, porque es solamente entonces que la casa le pertenece plenamente y para siempre… La cuarta habitación le da al hombre la inmortalidad hacia la cual todas las enseñanzas religiosas se esfuerzan en mostrarle el camino”.


(G.I. Gurdjieff).



SER POSITIVOS: EJERCICIOS



Orientación matinal


Debe comprender bien que la mente es una herramienta preciosa y central que necesita una orientación para funcionar de la mejor manera posible y en una dirección positiva. De otra forma, se perderá por el camino que le marca la mirada y la proyección de los condicionamientos psicoafectivos que la hacen trabajar.
Por eso, la mañana es un momento precioso para orientarlo positivamente. Su propia decisión armónica le proporcionará la orientación adecuada.
Y esto se puede hacer aplicando una sencilla técnica. Después de sentarse comodamente y hacer una respiración positiva (expulsando el aire por la boca), visualice, como una película, el desarrollo probable de la jornada, buscando especialmente los instantes de naturaleza positiva, por muy sutiles y breves que puedan ser.
Puede ser un fragmento musical que va a escuchar en la radio del coche, o una conversación agradable que va a tener con un colega que le cae simpático.
Localice esos momentos y subráyelos en el desarrollo de la película que acaba de proyectarse a sí mismo.
Este ejercicio, sencillo y breve, realizado de manera regular, sensibiliza la mente para percibir la positividad y le permite poner en valor los numerosos momentos positivos que quizás no había percibido hasta ahora.
Si lo práctica, se volverá más sensible ante la positividad y más distante a lo negativo. La idea es convertirse en los que podría llamar un "cazador de positividad".

CENTRO DE GRAVEDAD

En cada individuo existe una brújula psíquica. La conexión permanente con esa brújula, que representa un conjunto de actitudes positivas que estamos estimulando y animando de forma técnica y sencilla (con ejercicios), es un auténtico pilar del bienestar interno.

Conectarse con cierta paz interior desarrolla el gusto por un estado del ser apreciable y que la mente buscará siempre que pueda. Ese gusto, conservado en la memoria de forma natural, actúa como una brújula activa a difeentes niveles, particularmente con la apuesta en funcionamiento de receptores e indicadores de actitudes o comportamientos que nos llevarían a perder el norte.

Un ejemplo de estas actitudes que nos descentran de nuestro eje de gravedad es: querer cambiar a otro.


Escribe un diario positivo:


Escribe cada día sobre las cosas que te han ocurrido o te han impactado como significativas y positiva.

jueves, 23 de abril de 2015

No hay evolución obligatoria, mecánica. La evolución es el resultado de una lucha Consciente.

martes, 21 de abril de 2015

TALLER, DÍA 21 DE ABRIL DE 2015


Lecturas:


La tarta de albaricoque





Había una vez, una anciana que había sido famosa durante 30 años por el sabor delicioso de sus tartas de albaricoque. Todo el mundo en kilómetros a la redonda había oído hablar de las tartas y las comían cuando tenían la ocasión. En el curso de los años, cientos de personas la asediaron pidiendo la receta.
Ella continuó haciendo las tartas todos los años durante la estación de la fruta de hueso; distribuía las tartas a diestro y siniestro, pero no le decía a nadie la receta.

Un día, temiendo que la mujer muriera sin haber transmitido el secreto, un hombre rico – quien también tenía algo de avaro al tiempo que amante de las tartas de albaricoque - ofreció una recompensa de cien monedad de oro por el secreto.
No pudo encontrar a nadie que cocinase tartas como la anciana, aunque una multitud de gente solicitase la recompensa, pretendiendo que podía hacerlo. Finalmente, sin embargo, se sorprendió al encontrar a la mujer a su puerta, ofreciendo vender la receta.
- Pensé que nunca se la dirías a nadie – balbuceó el hombre rico.
- Ah, pero primero quería encontrar un signo de sinceridad –dijo la anciana.
- Pero ¿cómo sabes que soy sincero? – preguntó el avaro.
- Tú-dijo la anciana- eres un hombre que ama el oro. Que estés dispuesto a desprenderte de una parte de él, y no digamos cien monedas de oro, muestra, al menos mediante tu propio patrón, que eres sincero. Esto es lo más cercano a la sinceridad que, según parece, podemos llegar en esta región. De modo que te daré el secreto.
El hombre rico se sentía encantado, tomó un lápiz y un trozo de papel y pidió a la mujer que dictase.
- No necesitaras lápiz y papel –dijo ella- ya que no hay mucho que decir. Recojo albaricoques gratis, de los árboles de gente caritativa. Luego añado agua y un poco de miel; y eso es todo lo que hay.
- ¡Pero así es como todos los demás hacen tarta de albaricoque! –exclamó el hombre-- Ciertamente no te voy a dar cien monedas de oro por decirme eso.
- Tómalo o déjalo- dijo la mujer.
- No tiene sentido alguno – dijo el avaro-, pero si el secreto no está en los ingredientes, debe encontrarse en la costra de la tarta. ¿Cómo la haces?
La mujer sonrió.
- No la hago en modo alguno. Me acerco al panadero de la villa y le pido algo de la masa pastelera que le haya cobrado, cubro el plato con la pasta y le pido que lo ponga en su horno junto con el pan que hornea, y así es como se hace.
- Pero debe de haber algo especial en las tartas- dijo el hombre-, y quiero descubrir lo que es.
- Muy bien – dijo ella-, sígueme y haz lo que hago y veremos cómo te las arreglas. Veremos si sabes lo que es una receta.

Fueron juntos de excursión por las huertas locales de albaricoqueros. La anciana, como es costumbre es esas partes, fue admitida libremente, mientras que el avaro tuvo que pagar una moneda de cobre antes de que se admitiese recoger tantos albaricoques como desease.
Llevaron los platos al panadero, e hicieron que les pusiese pare de la masa pastelera que le sobraba encima de las tartas. Luego se dedicaron a esperar hasta que éstas estuvieron listas.
Cando las tartas estuvieron horneadas y se enfriaron, las probaron. La tarta de la anciana era deliciosa. Pero la tarta hecha con la fruta escogida por el avaro era en verdad muy ordinaria.
Él meneó el cabeza, perplejo, y luego comenzó a injuriar a la mujer, la llamó impostora por haber introducido algún ingrediente secreto, luego necia por no transmitir el secreto, y finalmente la tachó de bruja en contacto con poderes malignos.
Una vez el hombre se quedó exhausto y se sentó en un banco en el exterior de la panadería, la anciana sonrió una vez más.
- Después de tus resoplidos y tu enojo, tras tus aires de superioridad y confianza en el dinero, tras todo ese absurdo arraigado en el desengaño de falsas esperanzas – dijo ella – te diré dónde te has equivocado.
“Como sabes, a las personas pobres se les permite recoger tanta fruta como deseen en nuestros huertos. En reconocimiento a esto, nunca he tomado la fruta madura y perfecta para mis tartas ya que granjero tiene el derecho a conservar la mejor fruta, de modo que pueda venderla para mantener a su familia. Así que siempre he recogido los albaricoques que no estaban maduros y los demasiado maduros, mezclándolos para mis tartas. Este es el secreto de su maravilloso sabor. Tú, por tu parte, codicias tanto la perfección y la ganancia que, como todos los demás que han buscado mi secreto, tomas siempre la fruta más atractiva. El resultado fueron tartas de albaricoque ordinarias.”

Con estas palabras guardó la bolsa de monedas de oro en su cinturón y siguió su camino.



EL EFECTO 99:

Esta era una vez un rey que estaba en busca de la felicidad ya que aún cuando tenía todos los placeres a su alcance debido a su inmensa riqueza, siempre se sentía vacio y nunca estaba satisfecho con lo que poseía. Tal era su infelicidad que admiraba a uno de sus sirvientes más pobres, que sin importar su condición económica, irradiaba dicha y gozo sincero por la vida. Motivado por lo anterior, fue con el sabio del reino a solicitar su consejo y le preguntó: ¿Cómo es posible que uno de mis sirvientes, aún siendo pobre sea más feliz que yo, el gran rey?
El sabio hizo una pausa y le contesto: Para poder explicarte la razón de tu infelicidad y de casi todos los hombres, necesito que comprendas EL EFECTO 99.
¿Y qué significa eso? pregunto el rey. Para que lo puedas comprender necesito que consigas un costal con 99 monedas de oro. Ya que lo hayas conseguido ven y podré explicarte. El Rey ni tardo ni perezoso fue de inmediato a conseguir lo que el sabio le había pedido y regresó con él. El sabio le dijo que lo que seguía para poder comprender EL EFECTO 99 era que siguieran a escondidas al sirviente hasta su casa, cosa que hicieron esa misma noche.
Cuando el sirviente entró a su casa, el sabio puso el costal con las 99 monedas en la entrada de su casa, tocó a la puerta y corrió a ocultarse junto con el rey.
Cuando el sirviente salió, vio el costal, lo recogió y se metió de nuevo a su hogar. El sabio y el rey prosiguieron a espiarlo desde la ventana.
Cuando abrió el costal, el sirviente quedó asombrado con su contenido, estaba encantado y sin perder tiempo comenzó a contar todas las monedas. Cuando terminó el conteo, se rascó intrigado la cabeza y comenzó de nuevo el conteo ya que él suponía que le hacía falta una moneda para completar las 100.
Al terminar el segundo recuento el sirviente se desesperó y comenzó a buscar debajo de la mesa sin rastro alguno de esa moneda perdida, por lo que comenzó a angustiarse.
Fue entonces cuando el sabio le dijo al Rey: Te das cuenta, eso es justamente a lo que me refería con el efecto 99. El sirviente, al igual que tú, han dejado de valorar la mayoría de sus bendiciones para enfocarse en los pequeños detalles que “creen” les hacen falta. En ello radica la infelicidad del ser humano.


Tareas:


Trabajo práctico:

Agradecer durante 5 días y cada día:

- 3 cosas que nos hayan hecho felices ese día.
- Y a 3 personas que nos hayan ayudado, beneficiado o hecho felices (en el presente o en el pasado pero que sintamos en ese día la necesidad de comunicar ese agradecimiento).


OBJETIVOS DEL CRECIMIENTO PERSONAL.


· Básicamente conocerse asimismo con honestidad, ubicando virtudes y defectos.

· Evaluar que quiere conservarse, mejorarse o cambiarse y ubicar la herramienta para hacerlo.

· Librarse de los obstáculos interiores y exteriores que alguna vez o de alguna manera impidan el liderazgo y el buen desempeño como líder y como trabajador.

· Ser quien se quiere ser, donde el pensar, el sentir y el actuar sean una unidad coherente, o guardar relación con la actitud personal de mucha responsabilidad.


¿Que es la Psicología Positiva?


La psicología positiva es una rama de la psicología de reciente aparición que busca comprender, a través de la investigación científica, los procesos que subyacen a las cualidades y emociones positivas del ser humano, durante tanto tiempo ignoradas por la psicología. El objeto de este interés es aportar nuevos conocimientos acerca de la psique humana no sólo para ayudar a resolver los problemas de salud mental que adolecen a los individuos, sino también para alcanzar mejor calidad de vida y bienestar, todo ello sin apartarse nunca de la más rigurosa metodología científica propia de toda ciencia de la salud.